SANTO DOMINGO.- El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE) exhorta a la población dominicana a la integración en las actividades cristianas de sus comunidades durante los días de la celebración de la “Semana Santa”, así como también invita a aquellos que se desplazan a los diferentes puntos geográficos del país a la moderación y la prudencia en las carreteras y balnearios para evitar llevar tristeza a las familias.
El representante de la entidad llama a ser austeros, de cara a la gran situación que vive el mundo y se hace cada día más evidente que los ciudadanos creamos conciencia de una realidad que impacta de manera global, reconociendo que la vida no termina en esta semana, sino que luego de esta continuará, por lo que todos, tanto gobernantes como gobernados, debemos unir esfuerzos conjuntos, para poder mantener el equilibrio social.
El presidente del CODUE, Pastor Feliciano Lacen Custodio, exhortó además a compartir en familia, transmitir los buenos valores a nuestros hijos, más aún cuando se observa una degradación progresiva en la sociedad, por lo que debemos invertir un espacio para trasferir valores y principios los cuales dieron resultado a esta nación.
Invita ser más solidarios y empáticos, amar al prójimo y observar este asueto con el recogimiento que merece la tradición cristiana que motiva esta conmemoración.
Sostuvo además que “la Semana Santa es un tiempo de reflexionar y de compartir la fe, el gozo y la alegría que nos produce la muerte y resurrección de Cristo, el cual nos da vida en abundancia. Es un tiempo propicio para dedicarse a la oración y reflexionar sobre el sacrificio que nuestro señor Jesucristo hizo al tomar el lugar de los hombres y recibir el castigo para liberar a la humanidad del pecado”.
El presidente Feliciano Lacen envía a todo el pueblo dominicano un mensaje de paz, armonía y de concordia, a la vez que motiva a la moderación del ruido, a racionar el agua, así como también exhortar a los políticos a hacer un alto en sus labores y reverenciar el tiempo especial de la Semana Santa, porque ellos también son parte neurálgica de la sociedad por lo que deben modelar armonía para que puedan encarar situaciones presentes que vivimos como país y para las cuales se necesita el consenso de todos.