SANTO DOMINGO.- Mientras 14 familias de Ribera del Ozama, refugiadas en la Escuela Elvira de Mendoza, en Los Mina, esperan de las autoridades la reubicación urgente en un lugar seguro, la comunidad educativa del plantel urge la desocupación de las aulas que se encuentran en condiciones deplorables para poder iniciar el año escolar el 20 de septiembre.
Los refugiados llevan hoy nueve días en la escuela, luego de un derrumbe provocado por la depresión tropical Grace, el domingo 15 de este mes, pero hasta ahora han sido suplido de alimentos, pero carecen de propuesta concretas sobre su futuro inmediato.
Los damnificados muestran preocupación porque se aproxima el año escolar 2021-2022 y no cuentan con informaciones concretas sobre su destino, ya que no puede regresar al lugar donde se produjo el deslizamiento de tierra.
Siriano Matos, presidente de la Junta de Vecinos La Javilla del Ozama, informó que los Comedores Económicos no han fallados en la entrega de la comida desde que fueron refugiados en el plantel, pero que el desayuno y la cena que suministraba la alcaldía de Santo Domingo Este (SDE) era solamente hasta este lunes.
Expresó que hasta el momento han sido visitados por la gobernadora provincial y el alcalde de SDE, quienes se comprometieron a localizar terrenos para levantar las viviendas en un plazo estimado de tres meses, pero en los últimos días no han tenido información al respecto.
Ayer Diana Encarnación, la embarazada con 39 semanas y madre de dos hijas, una de seis y otra de dos años, ayer fue ingresada en el hospital materno Reynaldo Almánzar, perteneciente al complejo Ney Aria Lora, en Santo Domingo Norte, debido a dolores de parto.
Sus compañeras de refugio se preguntan hacia donde iría Encarnación una vez sea dada de alta en el hospital, ya que sería imposible que regrese al refugio con un recién nacido.
La Escuela Elvira de Mendoza, es una edificación de ocho aulas, para albergar a 600 estudiantes, pero de dos baño con que cuenta solamente uno está en servicio, el otro no está en condiciones para ser utilizados por los alumnos.
Eunice Cubilete, subdirectora del plantel explica que la escuela debe ser sometida a una reparación urgente de pintura, arreglo de baños, piso, dotación de agua potable y otros servicios fundamentales para impertir docencia.
Mientras tanto, informó, se encentran en proceso de inscripción y reinscripción de estudiantes para el año escolar que se avecina, que sería presencial, luego que la pandemia del Covid-19 provocara que el reciente terminado año escolar fuera virtual.
En la escuela Elvira de Mendoza se imparten docencia desde el primero inicial hasta el octavo (ahora segundo) de acuerdo a la nueva modalidad.
Caliza Rosario, presidenta de la Sociedad de Padres y Amigo de la Escuela, exhorta a las autoridades de Educación para que de inmediato acudan a reparar el plantel, que además es una edificio prestado.