SANTO DOMINGO NORTE, República Dominicana.- Vecinos del sector Salomé Ureña, Sabana Perdida, Santo Domingo Norte, denuncian el colapso del sistema de alcantarillado sanitario del lugar lo que provoca el desborde de las aguas residuales en los hogares y calles con las consecuencias que produce para la salud.
En una parada en la avenida Los Restauradores, frente al tanque de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) los vecinos reclamaron de esta institución la solución urgente del problema, debido a que afecta la salud de más de 700 familias que habitan el sector.
Juan Isidro Rivera Santos, presidente de la junta de vecinos, deplora que a pesar de que han visitado a la CAASD en múltiples ocasiones para plantear el problema, la institución no lo ha resuelto, lo que atribuye a falta de equipos, ya que cuenta con personal calificado.
Advierte que no solucionar el colapso del sistema de drenaje sanitario en Salomé Ureña, el costo se multiplicaría por tres cuando el gobierno tenga que invertir millones de pesos en salud, a parte del costo que conllevaría solucionar el problema de las laguas residuales.
“Estamos cansados de tocar puertas, pero la CAASD no cuenta en Santo Domingo Norte ni siquiera con una cinta para destapar una simple tubería, a pesar del personal humano dispuesto a trabajar”, expresó el dirigente comunitario.

Recuerda que Salomé Ureña es un sector construido hace 42 años para maestros y obreros, pero hace alrededor de 10 que el sistema sanitario colapsó.
Paulina Guerra, informó que debido a la situación las aguas residuales penetran a las viviendas, los patios y calles, con un hedor nauseabundo, que ha llevado a muchos a los centros de salud.

Considera que las autoridades deben sustituir las líneas primarias y construir una planta de tratamientos, tras recordar que cuando se fundó el barrio lo que se hicieron fueron dos piletas abiertas, pero luego se construyó un barrio encima, denominado Villa Progreso, así como Acapulco.
Señala que el desborde de las aguas sanitarias afectan a los estudiantes de la escuela República del Ecuador, debido a que corren por sus alrededores.
Paulina Guerra, indicó que las heces fecales navegan en el interior de su vivienda, y que otros vecinos se han visto empujados a  vender sus casas y emigrar a otros lugares porque no aguantaron la situación.