SANTO DOMINGO.- Las Organizaciones que conforman la Mesa Nacional para las Migraciones y Refugiados en República Dominicana, condena las deportaciones masivas de nacionales haitianos por parte de países de la región, sin que se tome en consideración la deplorable situación de crisis humanitaria por la que atraviesa Haití.
Mientras valoran el esfuerzo del presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, en la Asamblea de Las Naciones Unidas (ONU) para que la comunidad internacional acuda en auxilio de Haití, que ve agravada su crisis luego del asesinato de su presidente Jovenel Moises.
Deploran las repatriaciones masivas desde México, Estados Unidos (EEUU), Bahama, Colombia, República. Dominicana y algunos países de Centro América)
En rueda de prensa, señalan que la realidad política, social y económica se ha deteriorado considerablemente en Haití, tras el asesinato del presidente Jovenel Moise el 7 de Julio, de igual manera el terremoto de magnitud 7.2 que azoto y la tormenta Grace que afecto con fuertes lluvias, de manera inmisericorde la zona impactada por el sismo.
William Charpantiel, coordinador de la MENAMIRD, expresa que la situación que vive la hermana nación de Haití, en este momento debe mover a la solidaridad, la cooperación y el acompañamiento no solo de las naciones del continente sino de toda la comunidad internacional.
Precisa que en este momento más de 4.4 millones de personas es decir más del 40% de la población padece de inseguridad alimentaria, a merced de disturbios liderados por pandillas y grupos armados y con una crisis estructural, lo que ha sumergido a la inmensa mayoría del pueblo haitiano en la más espantosa miseria y pobreza.
Lamenta que en medio de esta triste realidad que sufre el vecino país en varios países de la región se empecinan en incrementar de forma inoportuna las deportaciones colectivas hacia Haití.
Desde la MENAMIRD, instan a las autoridades migratorias de los países de la Región a detener las deportaciones hacia Haití hasta que se pueda normalizar la crisis Humanitaria en dicho país.
Además, entienden que en muchos casos las deportaciones son arbitrarias, colectivas y sumarias.
“Reconocemos el derecho soberano del Estado Dominicano de deportar a extranjeros que residen de manera irregular en territorio dominicano, pero deben ser observados las normas constitucionales y estándares de derechos Humanos”, estima.
Recuerda que en el caso del Estado Dominicano uno de sus funciones principales es la protección de los derechos fundamentales de las personas, esencialmente su dignidad Humana.
Precisa que la dignidad Humana es un valor supremo, el Origen de todo derecho básico y es un principio fundamental del Estado social y democrático de derecho.
Los Estados de la Región deben respetar los derechos de todas las personas migrantes, de su integridad personal, unidad familiar, propiedades y el principio de no discriminación racial.
Los inmigrantes en situación irregular tienen derecho a una evaluación individual de sus casos de conformidad a las normas y estándares internacionales de derechos humanos.
De continuar dicha práctica de violación de los derechos Humanos del inmigrante coordinaremos acciones de defensa de los DDHH de esta población en la región y notificaremos los casos de cada país al relator especial de los derechos humanos de los migrantes de la ONU, a la Oficina para la coordinación de asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA) a la Comisión Interamericana de los DDHH(CIDH) Y a otro organismo de protección internacional de DDHH.