Legisladora de la Fuerza del Pueblo culpa al Congreso Nacional por no cumplir su papel de fiscalizar las acciones del gobierno.
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- A pesar de contar con los ríos y presas más importantes del Cibao, los municipios de San José de Las Matas y Jánico, provincia Santiago de Los Caballeros, no cuentan con sistemas de abastecimiento de agua potable.
Así lo denunció la diputada de esa demarcación, Llaniris Espinal en sesión de este cuerpo legislativo, en la que culpó al Congreso Nacional por no cumplir su papel de fiscalizar las acciones del gobierno.
¿Qué sucedería, honorables diputados, si al momento de levantarse no encontraran agua para bañarse o saciar su sed? Preguntó Llaniri Espinal a sus compañeros del Pleno.
Esa es la realidad que viven a diario millones de nuestras familias en los barrios y comunidades de nuestro país, se respondió mirando a sus colegas sentados cómodos en sus curules donde reciben agua, jugo, café, chocolates, té y cualquier otra cosa que apetezcan.
“Lamentablemente, nuestra gente sufre estas carencias tan básicas porque hemos fallados como creadores de políticas públicas, como fiscalizadores del erario y como sus representantes; nosotros y los congresistas que, durante décadas, han pasado por este Congreso”, apuntó.
Caso concreto
Consideró que esa triste y lamentable realidad es aún más dolorosa cuando afecta a personas que viven a orillas de los ríos y las presas, viven con el agua como es el caso de sus pueblos San José de Las Matas (SAJOMA) y Jánico.
En el caso de Jánico, uno de los municipios más antiguos de la RD y, probablemente, uno de los más maltratados, ubicado a escasos kilómetros del complejo hidroeléctrico Tavera-Bao, varios de sus sectores más importantes fueron aislados durante la construcción de estas obras, destruyendo su capacidad económica.
Y, pese al tiempo transcurrido, precisa, las autoridades no han sido capaces de garantizar lo más esencial para la vida humana, agua, por lo que a pesar de promesas constantes, aún no se le construye el acueducto merecido y urgentemente necesario.
En el caso de SAJOMA, el municipio más grande del país, con más de 1,500 kilómetros cuadrados y, proporcionalmente, uno de los que más aporta al desarrollo nacional a través de su extraordinaria biodiversidad, hoy vive bajo una presión preocupante por la falta de políticas estatales.
Sus ríos, Bao, Jagua, Inoa y Amina, principales afluentes del Yaque del Norte, un río que agoniza pero que sostiene gran parte del desarrollo nacional, no han sido suficientes para que SAJOMA tenga un acueducto.
Consideró indignante que en los pueblos donde nacen los ríos, el agua llegue a los hogares en camiones y no a través de un servicio digno proveniente de un acueducto.
“Por eso, hoy levanto mi voz en nombre de mis dos pueblos cansados de sufrir la falta de agua potable y solicito, además, de la aprobación de dos resoluciones que he sometido hace varios meses”, expresó la diputada Llaniris Espinal.