MANZANILLO, Montecristi, RD.-El Centro Bahía de Manzanillo para el Desarrollo Regional (CEBAMDER) ha confirmado mediante fotos y vídeos el posible «inminente desastre ambiental en Manzanillo» debido al relleno con caliche de uno de los principales humedales ubicado en la orilla de la Playa Estero Balsa.
Este acto es llevado a cabo por el Consorcio de Empresas Eléctricas que se están instalando en Manzanillo con el objetivo de producir energía, situación que ha sido denunciada por Eleuterio Martínez, presidente de la Academia de Ciencia.
Frank Valenzuela, presidente de la Organización no Gubernamental, denunció enérgicamente la degradación de los humedales de Playa Estero Balsa destacando la necesidad de una mayor responsabilidad por parte de las empresas involucradas.
Criticó severamente la falta de compromiso del Ministerio de Medio Ambiente en cuanto a la política de protección al medio ambiente en la República Dominicana.
Valenzuela acusó a Mario Méndez, de la firma Consultora Empaca, de mentir al país y sobre todo a Manzanillo, al afirmar que «ese componente no es parte de la planta, es parte del puerto y de un astillero que se construirá ahí, y eso es un proyecto del Gobierno».
Según Valenzuela, Méndez está al tanto de que la empresa Energía 2000, que construirá una de las plantas, es la responsable de ese ecocidio ecológico y que, al fin y al cabo, ambos consorcios están interconectados en lo que se está llevando a cabo en Manzanillo.
El presidente de CEBAMDER cuestionó la credibilidad del «Estudio de Impacto Ambiental» realizado por la firma EMPACA ya que con ese pronunciamiento se descalifica cuando uno de sus principales gerentes es capaz de mentir de manera vulgar a Manzanillo y al país.
Valenzuela argumentó que el estudio es una simple justificación, ya que EMPACA no ha realizado ningún estudio de impacto ambiental sobre la destrucción de 500,000 metros de terreno donde se instalará la planta de gas.
Valenzuela denunció que estas acciones perjudiciales están ocurriendo ante los ojos de los funcionarios responsables del Ministerio de Medio Ambiente, quienes deberían garantizar un equilibrio entre el progreso y la preservación de ecosistemas vitales en Manzanillo, y en particular del área protegida del Parque de Manglares Estero Balsa.
Aseguró que los funcionarios del Ministerio de Medio Ambiente están conscientes de que el relleno de humedales con caliche, especialmente en la orilla de la Playa Estero Balsa, amenaza la biodiversidad del ecosistema de manglares, provocando la extinción local de muchas especies de flora y fauna, así como la alteración del ciclo de nutrientes y el aumento del riesgo de inundaciones en la zona costera.
Reveló que, además del relleno con caliche, la empresa Energía 2000 está llevando a cabo acciones irresponsables y de extrema gravedad en Manzanillo, particularmente en el Parque de Manglares de Estero Balsa.
La compañía, encargada de instalar la tubería de manera subterránea, está extrayendo tierra directamente de uno de los humedales para rellenar las zanjas donde se colocarán las tuberías. Esta práctica pone en peligro la integridad del ecosistema y refleja una falta de consideración por la preservación de los valiosos recursos naturales de Manzanillo.
El presidente de CEBAMDER agregó que, además, el relleno de humedales con caliche puede acelerar la erosión costera, degradar la calidad del agua y afectar negativamente la pesca local y la seguridad alimentaria.
Los manglares son áreas de reproducción y cría importantes para muchas especies de peces y mariscos, por lo que su degradación podría tener consecuencias devastadoras para las comunidades locales que dependen de estos recursos.
Valenzuela instó a las autoridades a tomar medidas inmediatas para frenar la degradación de los humedales y garantizar la protección de la biodiversidad y los ecosistemas en Manzanillo.
Además, hizo un llamado a la sociedad civil y a las organizaciones ambientales para que se unan en la defensa de los recursos naturales y la lucha contra prácticas perjudiciales como el relleno de humedales con caliche.
Afirmó que la situación en Manzanillo pone de manifiesto la importancia de contar con políticas de protección ambiental sólidas y un compromiso real por parte de las autoridades y las empresas para garantizar el desarrollo sostenible y la preservación de los ecosistemas vitales en la República Dominicana.
Es fundamental que todos los actores involucrados trabajen conjuntamente para encontrar soluciones que permitan conciliar el crecimiento económico con la protección del medio ambiente y la biodiversidad.
En este contexto, es crucial que se realicen estudios de impacto ambiental rigurosos y transparentes antes de la implementación de cualquier proyecto de desarrollo que pueda afectar a áreas protegidas y ecosistemas sensibles.
Asimismo, la supervisión y el control por parte de las autoridades ambientales deben ser efectivos y constantes para garantizar el cumplimiento de las normas y la protección de los recursos naturales.
Finalmente, el presidente del Centro CEBAMDER aseguró que la preservación de los humedales y manglares de Playa Estero Balsa es una responsabilidad compartida por todos los sectores de la sociedad, y es imperativo que se tomen acciones concretas para evitar un desastre ambiental irreversible en Manzanillo.