SANTO DOMINGO, RD.- A pesar de nuevos conatos de incendios en el penal de La Victoria la noche del sábado, familiares de privados de libertad cuestionaron que al mediodía de ayer la ausencia de autoridades del Ministerio Público (MP) y Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC).
Sin embargo, un comunicado de prensa de la DGSPC, señala que cientos de personas han logrado contactar a sus familiares recluidos en áreas más seguras del penal de La Victoria y en diferentes centros de corrección y rehabilitación, luego del incendio que el pasado lunes 18 de marzo, afectó parte de las instalaciones del citado centro de privación de libertad.
Elpidio de Los Santos Guzmán acudió ayer domingo a la cárcel La Victoria donde su hijo Carlos Guzmán (Ñico) con el objetivo de dejarle dinero para que pueda desenvolverse, pero no pudo, ya que no permitieron las visitas directas.
Explicó que los agentes de puesto estaban dispuestos a llevar el dinero, pero mejor prefirió regresar a casa, porque no confiaba en los Policías que se ofrecieron para llevar el encargo a su hijo, quien se encuentra en el área denominada Alaska.
María Belén, con un familiar en el penal fue llamada la noche del sábado por su pariente para informar que estaban rompiendo el candado de la cerda en Los Pasillos porque se estaba incendiando.
Luego escuchó la sirena de los bomberos, mientras observaba el humo que se esparcía desde la cárcel, por lo que extrañó la ausencia de autoridades en las primeras horas de ayer domingo.
José Ramón de León Jiménez llevaba tres meses en prisión preventiva en una de las cerda siniestrada, pero se salvó por un milagro de Dios, reza su madre Carmen Jiménez, quien esperaba información de su hijo en una fila.
Carmen llegó temprano ayer con prendas de vestir y comidas cosidas para su hijo con la esperanza de verlo luego del fuego, pero tuvo que conformarse con enviarlos con los agentes de seguridad, porque no estaba permitida la visita a los reos.
“El me llamó que estaba pasando trabajo, pero que estaba vivo gracias a Dios, a pesar de que estaba recluido en la 5-6 que fue devorada por el fuego”, expresó.

Alfredo Santos, estaba en la cerda 1-2, pero el día del incendio estaba siendo intervenido quirúrgicamente en el hospital, narra su madrastra Victoria Abad.
Joselín Mota, madre de Juan Carlos, señala que su hijo está vivo porque Dios es grande, ya que sufre de epilepsia y pudo escapar del fuego.
Aunque no ha podido verlo, si ha hablado con él y aparentemente está bien, por lo que llegó con prendas de vestir, sabana y otros atuendos para hacérselo llegar.

Ausencia
Si algún funcionario de las entidades citadas acudió a la Penitenciaría de La Victoria, no se dejó ver por los periodistas que estuvieron en la puerta desde las primeras horas de la mañana, que si observaron llegar unidades de la Policía Nacional (PN) y del Ejército de la República Dominicana (ERD).
En el comunicado, Roberto Hernández Basilio, director general de la DGSPC, explicó que empleados de esa institución continúan trabajando en el protocolo y la mesa de ayuda establecida con esos fines, mediante la cual “cientos de familias han logrado identificar sanos y salvos a sus parientes trasladados de áreas luego del siniestro”.
Sin embargo, hasta el mediodía de ayer en la carpa colocada en la entrada de la cárcel no constaba con el personal de esa Dirección que en días anteriores ofreció asistencias a familiares de los reos.
Según el registro de la DGSPC, hasta el sábado habían sido asistidas unas 243 familias de privados de libertad distribuidos en las diferentes áreas del referido centro penitenciario para ofrecer asistencia sobre los traslados dentro del penal y a otros centros.
DGSPC informó que hasta este sábado han sido trasladados a centros de corrección y rehabilitación como el CCR El Pinito, La Vega, 294 privados de libertad; al CCR Vista al Valle, de San Francisco, 98; CCR Anamuya, Higüey, 175; CCR Cucama, La Romana, 62; CCR San Pedro de Macorís 23, CCRA Haras Nacionales 12; CCR Elías Piña 72, y CCR Batey Bienvenido 36.