SANTO DOMINGO. -Miles de familias del Distrito Nacional y del Gran Santo Domingo son alertadas por brigadas de la Defensa Civil, ya que luego del paso del huracán Fiona los ríos bajan con grandes volúmenes de aguas que penetran a las viviendas.
Mientras toneladas de lilas, colchones, pedazos de neveras y otros residuos sólidos son represados en el puente Flotante que comunica el Distrito Nacional con Santo Domingo Este y que son empujados por brigadas hacia el otro lado para que vayan al mar.
Desde ayer los ríos Ozama e Isabela comenzaron a bajar con grandes cantidades de agua, al tiempo que arrastraban todas las lilas que cubrían sus superficie, ya que estas funcionan como mecanismo de defensa ante el grado de contaminación que los afectas.
Delfín Rodríguez, director de Operaciones de la Defensa Civil, informó que monitorean el curso de los ríos, no solamente del Ozama y el Isabela, sino de otros que los alimentan como Dajao, Tosa, Guanuma, Cabón y otros.
Precisa que luego de tres días de intensas lluvias es que estos grandes ríos bajan con grandes cúmulos de agua y penetran a a cientos de viviendas construidas en las márgenes.
Entre los sectores que resultan más afectados por crecidas de ríos son Los Coordinadores, La Barquita Norte y Acapulco en Santo Domingo Norte, así como La Lila, Tres Brazos, La Javilla de Los Mina, Ribera del Ozama y otros en Santo Domingo Este.
Asimismo, en el Hoyo, Las Casitas, en la Zurza, además de Capotillo, sobre todo, al final del Túnel, Las Cañitas, Gualey y La Ciénaga, en el Distrito Nacional.
Rodríguez, explicó que la Defensa Civil junto a las alcaldías del Distrito Nacional, de Santo Domingo Este y Norte, quienes dirigen los Comités de Prevención, Mitigación y Respuestas en sus respectivos municipios, están haciendo su labor en ese sentido.
Mediante recorrido por el litoral y parte del Ozama, se observaron residuos llegando al litoral, especialmente a las playas de Guíbia, Fuerte San Gil y Montesinos, mientras una grúa acuática trataban de limpiar la gran alfombra verde frente al Flotante que se convierte en represa cuando hay crecida.
Mientras la grúa que denominan “Cangrejo” remueve las lilas y los residuos, dos botes los empujaban por debajo del Flotante para que siguieran hacia el Mar, cuando lo correcto hubiera sido sacarlos del río y llevarlos al vertedero.
Además de ser la gran cloaca del Gran Santo Domingo, los ríos Ozama e Isabela también son el gran vertedero del Distrito Nacional y los municipios de esta demarcación.
Cando se producen fuertes aguaceros estas fuentes de agua se limpian y entonces convierten el Litoral Sur del Distrito Nacional en el destino final de los residuos sólidos, como sucede en estos momentos.