SANTO DOMINGO.- El presidente Luis Abinader advirtió que los efectos derivados del cambio climático podrían ser más devastadores que la pandemia del Covid-19, por lo que asume la carta de la XI Conferencia Iberoamericana de Ministros de Medio Ambiente para presentarla en la XXVIII Cumbre Iberoamericana a efectuarse en el país en marzo del año próximo.
En su conclusión, La XI Conferencia señala la urgencia de acuerdos políticos que permitan una transición hacia una economía verde, inteligente, y circular, con modelos de consumo y producción sostenibles, enfocada en el bienestar de todas las personas, además que enfrente las desigualdades, la pobreza y la precariedad.
Al cierre de la cumbre que durante dos días se desarrolló en Santo Domingo, el mandatario manifestó que República Dominicana apuesta a la protección del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático, por lo que asume el compromiso de la XI Conferencia.
Aseguró que la Carta Iberoamericana surgida de esa Conferencia será adoptada como uno de los principales productos de la XXVIII Cumbre de Jefes de Estados Iberoamericana a efectuarse en Santo Domingo en marzo del año próximo.
Sostuvo que el documento responde al clamor de los ciudadanos exigiendo más acciones de parte de los gobiernos, la que asume debido a que el deterioro del medio ambiente y el cambio climático afectan cada vez con mayor dureza a las economías y amenazan los avances en la región.
Apuntó que esas amenazas son más peligrosas para países insulares como los del Caribe, y especialmente para República Dominicana que ocupa el décimo lugar en el mundo en cuanto a vulnerabilidad.
“Vulnerabilidad que se ve incrementada por factores como la pobreza, la desigualdad, la densidad poblacional en nuestros respectivos países”, precisó el mandatario.
Señaló que recuperados los efectos de la pandemia, hay que pensar en el mundo que viene, el sistema económico que debe consolidarse de ahora en adelante, ya que los retos climáticos pueden tener consecuencias mayores que los del Covid-19.
“Por eso es que nuestro lema hacia la Cumbre Iberoamericana es Recuperación Restructuración, Juntos por una Iberoamérica Justa y Sostenible, convencido de que la recuperación de las economías, debilitadas por la pandemia, y altamente vulnerable a los afectos del cambio climático debe ser una recuperación verde”, exclamó.
Indicó que lo vivido en el Covid-19 deber servir como motor de cambio para una acción más rápida y decidida, y que RD lo dice con la convicción de sentir con mayor intensidad esa realidad.
El ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Miguel Ceara Hatton consideró que la Carta Medioambiental Iberoamericana sería el mayor acuerdo político al que la Conferencia Iberoamericana haya llegado en temáticas medioambientales.
Para elaborar la Carta se ha establecido un grupo de trabajo, coordinado por República Dominicana y con el apoyo de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), quienes trabajarán para definir el contenido, alcance y objetivos de la misma.
Acuerdos
Los 22 países participantes acordaron el compromiso reforzado con el Acuerdo de París para luchar contra el cambio climático y sus impactos.
Avanzar en los diálogos para el establecimiento de metas ambiciosas como la de alcanzar la neutralidad de carbono a mediados de siglo o la protección del 30% de territorios marinos y terrestres para detener la pérdida de biodiversidad.
Fortalecer, consolidar y transversalizar la dimensión medioambiental y la lucha contra el cambio climático en todos los escenarios políticos y técnicos de la Conferencia y cooperación Iberoamericanas, reconociendo que esta lucha requiere de un abordaje holístico que involucre diversos sectores.
Avanzar en la gestión integral de los recursos hídricos, clave para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Promover medidas, políticas y programas que eliminen las desigualdades de género y garanticen una adecuada atención y respuesta a las necesidades específicas de las mujeres y las niñas.
Impulsar la transformación y el fortalecimiento de la financiación climática, con el objetivo de asegurar la coherencia de los flujos financieros con un desarrollo bajo en emisiones y resiliente al cambio climático, en línea con el Acuerdo de París, e hicieron un llamado para facilitar el acceso de los países iberoamericanos a este financiamiento.