SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La frontera es más que una línea divisoria, es el resultado de la feroz Batalla de Beller en la que el Ejército de la República Dominicana derrotó el 27 de octubre de 1845 al poderoso ejército de Haití que se resistía a aceptar la Independencia dominicana proclamada el 27 de Febrero de 1844.
Así lo recordó Juan Pablo Uribe, presidente de la Comisión Permanente de Efemérides Patrias (CPEP), al pronunciar el discurso de rigor durante un acto solemne en el Panteón Nacional, a propósito del 180 aniversario de la gesta patriótica.
Uribe destacó que “180 años después de la fulgurante Batalla de Beller, en la redondez numérica del calendario épico, proclamamos una vez más que en la frontera comienza la patria y en ella la dominicanidad combatiente que fue ungida por el juramento trinitario, en el nombre de la Santísima, augustísima e indivisible Trinidad de Dios Omnipotente”.
Fue una oficiada una misa por el reverendo padre Wellington Rosario, mientras que Gustavo Ubrí, director del Panteón Nacional, dio las gracias a las Fuerzas Armadas por su significativa presencia, además de destacar el carácter religioso de este monumento de la patria.
En ese sentido, Juan Pablo Uribe proclamó que eucaristía es en acción de gracia a la divina providencia que en su infinita misericordia ha cuidado a la única nación del mundo que tiene en su escudo una biblia abierta en el evangelio de Juan y su bandera con la cruz redentora encarnada.
“Acción de gracias en momentos en que somos afectados, por movimientos de la naturaleza propios de la temporada ciclónica, por eso termino mis palabras, en situaciones como estas diciendo gracias padre amado, gracias Jesucristo, gracias espíritu santo, República Dominicana es tuya”, concluyó Uribe.
El acto contó con una amplia representación de miembros del Ejército de República Dominicana, la Armada Dominicana, la Fuerza Aérea, la Policía Nacional y el Cuerpo de Bomberos de Santo Domingo.