SANTO DOMINGO.- Tras conmemorarse este jueves primero de enero el 201 aniversario de la Independencia Efímera, el presidente de la Comisión Permanente de Efemérides Patrias (CPEP), Juan Pablo Uribe, proclamó que en el país no hay cabida para el racismo y la xenofobia, al tiempo que consideró que entre haitianos dominicanos no es posible una fusión.
Manifestó que esto ha permitido una convivencia democrática, por lo que decir lo contrario, es tergiversar la verdad y dañar inmerecidamente la imagen real de un pueblo noble como el dominicano.
Explicó que fue un acontecimiento que separó a RD del imperio español hasta que fue destruida por la invasión y ocupación haitiana durante 22 años y terminó cuando se produjo el trabucazo y el grito independentista de los trinitarios el 27 de febrero de 1844.
Afirmó que el presidente Luis Abinader, ha estado a la altura histórica de las circunstancias, actuando con dignidad y coherencia patriótica en la defensa de los intereses nacionales como líder del Estado Dominicano.
Uribe consideró que los hechos históricos, no deben permanecer como piezas distantes de museo, por el contrario, deben ser lecciones ejemplares en la actualidad, por eso el espíritu patriótico de la independencia efímera fortalece en una coyuntura delicada y compleja que convoca al pueblo dominicano a la mas fuerte unidad en torno a los principios de soberanía nacional, integridad territorial y dominicanidad”.
Uribe sentenció que no hay espacio para posturas tibias, indefinidas, indiferentes o confusas, o se está con la nación, con la patria o se está de espalda a ella, porque así lo definió Juan Pablo Duarte.
La CPEP celebró ayer en el Panteón Nacional, el 201 aniversario de la proclamación de lo que se conoce en la historia dominicana, por su brevedad, como la Independencia Efímera, 1 de diciembre de 1821 al 9 de febrero de 1822.
En un discurso de exaltación de la dominicanidad, el presidente de Efemérides Patrias, Juan Pablo Uribe, dijo que:“La Independencia Efímera de 1821 lidereada por el prócer ilustrado Jose Núñez de Cáceres es un eslabón esencial en la conformación de la nacionalidad dominicana.
Explicó que no surgió por un golpe de suerte o un capricho del tiempo en la isla, sino que es la expresión de un largo, áspero, complejo y combativo proceso de estructuración de identidad dominicanista y cuya voluntad de patria es digna de figurar en las grandes narraciones épicas de la humanidad.
Apuntó “que hemos llegado al siglo XXI, siendo un país abierto, hospitalario, solidario donde no hay cabida para el racismo y la xenofobia, lo que nos ha permitido una convivencia democrática, decir lo contrario, es tergiversar la verdad y dañar inmerecidamente la imagen real de un pueblo noble como el dominicano”
Dijo que “la bandera tricolor con la cruz de la redención de la dominicanidad seguirá guiándonos, el escudo de la dominicanidad, único con la sagrada biblia abierta en el centro, seguirá iluminándonos y las palabras del mas grande de los dominicanos Juan Pablo Duarte estatuidas en su ideario seguirán escuchándose y respetándose: “Entre los dominicanos y haitianos no es posible una fusión”.
En el marco de la conmemoración patriótica, Efemérides Patrias realizó el despótico de una ofrenda floral, seguido de un ritual ante la llama votiva y luego se entonaron las gloriosas notas del Himno Nacional.