SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Una cadena humana de casi un kilómetro de largoexigió ayer frente al Jardín Botánico Nacional Doctor Rafael María Moscoso, su preservación ante la amenaza del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) y el de Medio Ambiente y Recursos Naturales, de utilizar parte del área protegida para ampliar la vía como medida para descongestionar el tránsito.

Sobre la acera que bordea la República de Colombia, bajo la consigna de “el Botánico no se toca”, los manifestantes tomados de las manos formaron una cadena humana que poco a poco expandió en la parte frontal del pulmón ecológico de la ciudad de Santo Domingo.

La protesta, convocada por el cineasta José María Cabral, envió un mensaje contundente a las autoridades: que el desarrollo urbano no puede seguir arrasando con los espacios naturales y que el Botánico sí tiene dolientes que lucharán por la preservación de cada árbol que allí se encuentra plantado.

El Jardín Botánico es el lugar donde muchos venimos a buscar un poquito de la salud que nos quita la ciudad con los tapones y el estrés”, expresó uno de los manifestantes.

Aseguró que el problema del caos vial no quedará resuelto sacrificando uno de los pocos pulmones verdes que le quedan a Santo Domingo.

Entre la multitud también sonaba una amplia variedad de relatos de personas, que contaban su vínculo con el parque.

En ese sentido, el organizador de la manifestación expresó que la actividad no solo se trató de la defensa del Botánico, sino, también un llamado a repensar todo Santo Domingo y ver en sus árboles y espacios verdes, una solución más profunda y duradera que el concreto. “Vamos a proteger no solo el Botánico, sino, todos los parques urbanos”, motivó Cabral.