SANTO DOMINGO, RD.- Aunque brigadas de la Defensa Civil avisan a quienes habitan lugares de alta vulnerabilidad para que abandonen sus hogares ante la incidencia de la tormenta Franklin, las familias residen esperar hasta el último momento para abandonar, por temor a ser víctimas de los ladrones.

Las cañadas y ríos del gran Santo Domingo comenzaron a crecer este martes, por lo que quienes habitan en sus alrededores expresan estar listos para abandonar una vez las agua penetren a las viviendas.

Desde el mediodía ya el Ozama comenzaba a penetrar a viviendas ubicadas en su margen oriental, específicamente en los barrios Ribera del Ozama, El Dique y La Lila, en Los Tres Brazos, en Santo Domingo Este.

En esa zona brigadas de la Defensa Civil avisaron a sus moradores para que abandonen sus casas antes que el río lo sorprenda y puedan ser arrastrados por sus aguas.

Juan Salas, presidente de la Comisión Nacional de Emergencia y director de la Defensa Civil, informó que su personal y voluntarios estaban en zonas de peligro prestos a actuar ante cualquier contingencia como consecuencia de la tormenta Franklin.

En tanto que la directora del programa Supérate, Gloria Reyes, coordina con la Defensa Civil para cualquier tipo de ayuda social a familias vulnerables que vayan a los albergues.

Zunilda Martínez, quien habitan en Ribera del Ozama, expone que ciertamente miembros de la Defensa Civil ya avisaron para que busquen un lugar seguro ante las posibilidades de fuertes lluvias provocadas por Franklin.

Sin embargo, señaló que todavía en la tarde permanecerían en sus casas para evitar que los ladrones carguen con sus ajuares.

Dulce Duval, propietaria de un pequeño colmado debajo del puente Francisco del Rosario Sanchez (El de La 17) tienen preparados tanques y sacos para echar las mercancías una vez el río Ozama se acerque al establecimiento.

Roberto Lara comenzó a enganchar algunos ajuares dentro de su casa a pocos metros del Ozama, pero no abandonaría el hogar hasta el último momento para evitar los delincuentes lo muden.

Informó que luego de los trabajos que ejecuta el gobierno en el proyecto Nuevo Domingo Savio, las aguas del Ozama ahora se meten con mayor intensidad a los sectores de la parte oriental.

Mientras tanto mostró algunas viviendas muy cerca del río, ya con el agua dentro, por lo que en pocas horas decenas de familias tendrían que abandonar y guarecerse en lugares seguros.

En cuanto al cúmulo de basura, muy cerca del Ozama, narra que los recolectores de la Alcaldía de Santo Domingo Este la retiran todos los días, pero que la falta de conciencia hace que muchos la lancen al río y cañadas.

De su lado, Angel David Vargas, habita próximo a donde se unen las cañadas La Colina y Las 800, dijo que no duermen desde anteanoche por temer a crecida repentina.

Insta a las autoridades de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) a que agilicen los trabajos de saneamiento de las cañadas para terminar con la pesadilla cada vez que se presentan fenómenos naturales.

Franklin Segura, encargado de la Defensa Civil en Los Ríos, Distrito Nacional, encabezaba una brigada que recorría este martes las zonas más vulnerables en la zona para avisar a sus moradores a que inicien el proceso de abandonar sus viviendas.

Brigadas de la Defensa Civil realizan desde esta mañana evacuaciones preventivas en lugares considerados de alta vulnerabilidad en el gran Santo Domingo ante la inminente llegada de la tormenta Franklin al territorio nacional.

Anoche familias que habitan en márgenes de los ríos Ozama e Isabela, así como sobre cañada o muy cerca de estas, se resistían a abandonar sus hogares por temor a que estas sean saqueadas por los delincuentes.